Comencé esta serie en mi anterior entrada intentando dar una interpretación clara del término weird, para lo que acudí a su etimología. Vimos que weird tiene unas connotaciones específicas de las que “extraño”, su traducción directa al español, carece.
Ahora toca abordar la expresión completa, weird fiction. Empecemos con su historia.
Antes que weird fiction, la expresión weird tale fue empleada por primera vez por J. Sheridan Le Fanu (1) y se hizo popular con la revista Weird Tales (2), cuyo primer número salió al mercado en marzo de 1923. Para entender el uso del término hay que aclarar que en aquella época los géneros no estaban tan definidos como lo están hoy; fueron precisamente las revistas pulp, que se especializaban en un tipo de historia determinado, las que les fueron dando nombre (3).
Weird Tales se especializaba en relatos de terror y temática inclasificable, bien merecedora de su calificativo weird, siempre con un pie anclado en el fantástico. Inicialmente publicaban relatos de horror sobrenatural clásico (historias de fantasmas y demás), hasta que apareció por allí un tal H.P. Lovecraft.
Lovecraft hizo suyo el término, y en su ensayo El horror sobrenatural en la literatura, que comenzó a escribir en noviembre de 1925, ya utiliza la expresión weird fiction (Wikipedia, Supernatural Horror in Literature, s.f.). En este ensayo no concreta mucho su definición, pero ya la emplea como un género o corriente propios dentro del género de terror:
que viene a significar más o menos esto:
De su definición y características, ya hablaremos. Aquí lo importante es que Lovecraft trata al weird como una corriente aparte, conceptualmente diferente del resto de géneros. Lo hace en este ensayo, en el resto de su obra y su copiosa correspondencia. Para Lovecraft la weird fiction tenía una tradición propia.
Después de Lovecraft se ha mantenido la definición de la weird fiction en términos generales. La explosión comercial de la literatura de género de los años 80 propició una nueva generación de autores que le dedicaron bastantes esfuerzos, cristalizando en el llamado New Weird en la primera década de este siglo XXI. El New Weird no ha supuesto una redefinición de esta corriente, sino una actualización de temas, caracteres y puntos de vista en un desinhibido cóctel de géneros. Si cabe, el New Weird ha hecho aún más ubicuo al weird.
La weird fiction queda, por tanto, establecida desde Lovecraft (5) como una corriente que nace del género de terror, con elementos sobrenaturales, extraños y que provocan temor y asombro en el lector. Es una definición simple y ambigua, pero aceptémosla provisionalmente para avanzar al siguiente paso, que es la traducción del término al español.
La traducción directa de weird fiction y weird tale es “ficción extraña”, y “relato extraño”, respectivamente. A esta traducción la encuentro dos problemas. El primero es que no tiene en cuenta ni las connotaciones del weird original, ni la tradición de la weird fiction, que parte del género del terror. "Ficción extraña" dice, en mi modesta opinión, bastante menos del relato que se está leyendo que el término original weird fiction.
El segundo problema es la apropiación de un término que empieza a tener un recorrido propio en nuestro idioma: en este excelente artículo de Jot Down (Calvo, s.f.) se traza un recorrido por la llamada “nueva ficción extraña”, una corriente propia en español que también está en auge y que tiene no pocos puntos de contacto con el weird, pero que parte de una tradición diferente, fuera del género de terror, más heterogénea y, desde mi punto de vista, muy interesante. Creo que es una corriente que ha encontrado un punto de apoyo sólido y que no debemos despreciar (6).
Si descartamos entonces el término “extraño”, ¿qué otras opciones nos quedan? Veamos qué han hecho los profesionales.
“Ficción fantástica” fue la elección de José Antonio Molina Foix en la traducción de El horror sobrenatural en la literatura (Lovecraft, 2010) para la Editorial Valdemar; es respetuosa con la tradición de la que parte, y así debe entenderse, pero despoja al término de su singularidad y significado. En la misma línea, wordreference propone “cuentos de miedo” para weird stories (Weird Stories, en Wordreference, s.f.).
Rafael Llopis en su clásica (e imprescindible) recopilación para Alianza Los Mitos de Cthulhu (Llopis, 1969) elige “cuentos de miedo” para, unos años después, decantarse por “cuentos siniestros” en su Historia Natural de los Cuentos de miedo (Llopis, 2013).
Mi conclusión es que no existe una traducción completamente satisfactoria. En cualquiera de los casos debemos sacrificar algo: tradición o connotaciones. Entonces, yo me pregunto: ¿para qué traducir? ¿Acaso La Guerra de las Galaxias no se llama ahora Star Wars?
Elijo, por tanto, no traducir el término. Mantendré los weird tales o weird fiction originales. Que no se extrañen, pues, los lectores al ver esas bárbaras expresiones entrometidas en los textos de este patético diletante. Me consolaré recordando que la página web de wikipedia en nuestro idioma está de mi lado, porque mantiene el término en inglés.
Sobre la imagen de la entrada de hoy
William Blake: El Gran Dragón Rojo y la Bestia del Mar, 1805. (frg.)
Repetimos con William Blake. Esta acuarela ilustró la portada de la recopilación de Joseph Thomas Sheridan Le Fanu “Dickon el diablo y otros relatos extraordinarios” editada por Valdemar en abril de 2017 (Le Fanu, 2017). La relación se entiende al leer la contraportada.
NOTAS
Aunque me he encontrado con esta atribución en varios artículos, entre otros Sucasas (2014) y Wikipedia (Weird Fiction, s.f.), no he sido capaz de obtener la fuente original de Sheridan Le Fanu. En todo caso la obra de este autor, fallecido en 1873, se adscribe con claridad al terror sobrenatural previo al terror materialista y representa una de sus más altas cimas.
Weird Tales es la primera revista dedicada específicamente al género de terror, surgida en la década más exitosa para las revistas pulp, los años 20 del siglo XX. Las revistas pulp toman su nombre del papel de baja calidad fabricado a partir de desecho de pulpa de madera (en inglés, “pulp”), lo que permitía abaratar el precio final (Wikipedia, Pulp magazine, s.f.)
De hecho el término Ciencia-Ficción ("Science Fiction" en inglés) fue acuñado por el editor de la revista Amazing Stories, que se empezó a publicar en abril de 1926 (Wikipedia, Science Fiction, s.f.).
Permítaseme reescribir un par de términos de la gran traducción de Juan Antonio Molina Foix para Valdemar (Lovecraft, 2010), y mantener el weird del original, además de remarcar los adjetivos que creo más definitorios.
Lovecraft detectó la corriente weird, lo que no quiere decir que fuera su inventor ni su iniciador. A partir de la aparición de Weird Tales, revista dedicada a relatos weird, Lovecraft intentó identificar los componentes definitorios y aisló de alguna manera esta corriente, que es anterior a él. El mérito de Lovecraft está en haber sabido ver y aislar esta corriente.
El término es cuestionable, pero muy válido para identificar una serie de obras con muchos puntos en común. Es evidente su deuda con la weird fiction, pero también su singularidad. Las editoriales Salto de Página y Aristas Martínez se han especializado en cierta manera en esta corriente. La última publica una revista periódica muy recomendable, Presencia Humana, con una buena muestra de autores, más escorada hacia el terror, y por lo tanto, más cercana al weird.
REFERENCIAS
Sucasas, Angel Luis (2014): Crisálidas. Presencia Humana, nº3, p.23. Ed. Aristas Martinez.
Weird fiction (s.f.) en Wikipedia. Recuperado el 26 de enero de 2018 de https://en.wikipedia.org/wiki/Weird_fiction
Pulp magazine (s.f.) en Wikipedia. Recuperado el 28 de enero de 2018 de https://en.wikipedia.org/wiki/Pulp_magazine
Science Fiction (s.f.) en Wikipedia. Recueperado el 28 de enero de 2018 de https://en.wikipedia.org/wiki/Science_fiction
Supernatural Horror in Literature (s.f.) en Wikipedoa. Recuperado el 28 de enero de 2018 de https://en.wikipedia.org/wiki/Supernatural_Horror_in_Literature
Lovecraft, Howard Phillips, (2013), Supernatural Horror in Literature, en Complete Works of H.P. Lovecraft, Reino Unido, Delphi Classics.
Lovecraft, Howard Phillips, (2010), El horror sobrenatural en la literatura y otros escritos teóricos y autobiográficos. Madrid, España: Valdemar.
Vandermeer, A. y Vandermeer, J. (Ed.) (2011): The Weird, a compendium of strange and dark stories. Londres, Reino Unido: Corvus.
Calvo, J. (s.f.), Nueva narrativa española: un mapa. En Jot Down Cultural Magazine. Recuperado el 29 de enero de 2018 de http://www.jotdown.es/2013/03/nueva-narrativa-extrana-espanola-un-mapa/
Weird Stories (s.f.) en Wordreference (s.f.). Recuperado el 30 de enero de 2018 de http://www.wordreference.com/es/translation.asp?tranword=weird%20stories
Llopis, Rafael (1969). Los Mitos de Cthulhu. Madrid, España: Alianza Editorial.
Llopis, Rafael (2013).Historia natural de los cuentos de miedo. Madrid, España: Ediciones y Talleres de Escritura Creativa Fuentetaja.
Le Fanu, Joseph Sheridan (2017). Dickon el diablo y otros relatos extraordinarios. Madrid, España: Valdemar.